The Walking dead continua su rumbo de esta segunda parte de la temporada en la que los pequeños grupos de supervivientes, separados unos de otros, buscan sobrevivir a la nueva situación. Sabemos que tanto el grupo de Rick, Carl y Michonne como el de Tyresse, Carol y las niñas; Mica, Lizzie y Judith van en busca de un lugar llamado el santuario, un emplazamiento para supervivientes anunciado en las vias del tren. En este episodio veremos como varios de estos pequeños grupos encaminará al mismo destino.

Maggie, Sasha y Bob
Antes de introducirnos en el momento actual de este grupo, el capitulo comienza con un flashback de Bob Stookey. El personaje, sucio y solitario, vaga sin rumbo, una vez más ha sido el unico superviviente de su grupo, y como si este nuevo mundo se riera de él, vuelve a estar solo. Sin energia ni ganas se mueve por carreteras y bosques, evadiendo de la forma más sencilla a los caminantes, durmiendo en el techo de un camión o refugiandose en una pequeña cueva. Pero todo cambia cuando Daryl y Glenn le encuentran y deciden llevarselo con ellos, hacerle unirse a su grupo.  Bob acepta a sabiendas de que le puede ocurrir lo mismo de otra vez.

La situación actual de este grupo es muy distinta, el pequeño grupo se tiene que enfrentar a los caminantes, pero la situación es peliaguda, ya que el bosque está gobernado por una espesa niebla que no les permite ver por donde llegará el peligro. Espalda contra esplada el trio se defiende como puede, incluso Bob acaba siendo mordido, por suerte se queda en un susto al ver que el mordisco no le ha infectado gracias a las vendas de sus heridas. Sin la brújula de Maggie, Bob decide guiarse por el sol con lo que sus pasos les llevan rapidamente hacia las vias del tren donde los ya conocidos carteles sobre el santuario les informan del cercano refugio. 

Este nuevo descubrimiento divide al grupo. Por un lado, Sasha prefiere buscar un edificio alto y resguardarse del peligro, sus pensamietos y emociones creen que nadie más que ellos han sobrevivido y que esta busqueda es una perdida de tiempo que puede llevarles a la muerte. Por otro lado, Maggie quiere seguir las indicaciónes de los carteles, suponiendo que Glenn puede que haga lo mismo, la esperanza es lo unico que la mantiene activa, sin ella no seria nada, un caminante más sin rumbo, pero con vida. El Bob desperanzado del flashback, es distinto al de ahora, el verse sobreviviendo con ellas, le ha devuelto la esperanza y prefiere mantener el grupo unido que separarlo, Maggie es demasiado cabezota y solo desea ayudarla, porque sola no podrá. Los tres se dirigen hacia Terminus, pero en el camino Maggie escucha a Sasha sus deseos de no dirigirse allí y se marcha por su cuenta. Aún asi Bob y Sasha la siguen gracias a las pistas  - escritas con sangre de zombie - que la chica deja para que Glenn vaya a Terminus. Pero esa persecución termina para Sasha, quien encuentra un edificio con posibilidades para ser un buen refugio. Bob se despide de ella con un beso y continua en solitario la persecución mientras Sasha va hasta el refugio, sube hasta la segunda planta y al mirar por la ventana descubre a Maggie rodeada de zombies muertos. Asustada golpea el cristal, con lo que al caer y romperse altera a todos los caminantes y despierta a Maggie que ahora se encuentra en peligro. Ambas chicas acaban con la pequeña horda de zombies y se sinceran, Sasha se siente asustada y Maggie debil. Finalmente deciden alcanzar a Bob y dirigirse a Terminus. 

Daryl y Beth
Daryl cada vez está más contento de tener a Beth a su lado, despues de los momentos de tension y posterior sinceridad entre ambos, quemar esa casa le ha ayudado a quemar su propia identidad, su miedos y su desesperanza. Ahora todo ha cambiado, no quiere sobrevivir, quiere vivir y por ello comienza a enseñar a Beth como seguir un rastro o como disparar la ballesta. Al rastrear una huella en el barro la chica acaba cayendo en una trampa para animales, provocandole una dolorosa contusión que le hace cojear. Daryl la ayuda desde ese momento, primero cuando pasan por un cementerio, en el cual se despiden de Hershel por ultima vez frente a una lapida que pone "Amado Padre".

Daryl se siente más a gusto cuanto más tiempo está con Beth y quiere quedarse allí con ella, disfrutando verdaderamente de la vida. Por desgracia, no todo es duradero y cuando escucha al perro ladrar - por segunda vez - abre la puerta y se encuentra cara a cara con una horda de caminantes. Daryl hace de señuelo para que Beth pueda escapar. Y aunque le cuesta deshacerse de todos ellos, lo consigue y sale de la funeraria a tiempo para ver como un coche se lleva a Beth. Daryl sigue el rastro del vehículo pero llega hasta un punto en el que no puede seguirlo y entonces cae, derrumbado, decepcionado de sí mismo. En ese lugar, con Daryl aún de rodillas le rodean varios hombres pidiendole su mochila - son los mismos hombres que se refugiaron donde estaban Rick, Carl y Mochonne -. Daryl rehusa darsela y le da un puñetazo a uno de ellos. El lider en vez de acabar con él en ese momento, le propone unirse a ellos a cambio de no matarlo, cosa que Daryl hace.

El episodio se cierra con la imagen de Glenn encontradon uno de los carteles de Terminus escritos por Maggie, con lo que descubre que su esposa está con vida.